El próximo domingo 17
de febrero, la República de Ecuador celebrará elecciones presidenciales. Además
de elegir al Presidente y Vicepresidente, las legislativas asignarán 137
miembros de la Asamblea Nacional, así como cinco miembros para el Parlamento
Andino.
De los candidatos a la
Presidencia de la República, nos centraremos en los tres que realmente tienen
mayores posibilidades. En primer lugar, el actual Presidente, Rafael Correa,
que mantiene un elevado nivel de aceptación por la gestión realizada, con la
“Alianza País”. A bastante distancia aparecen Lucio (Lucho) Gutierrez, anterior
Presidente de Ecuador, que se presenta bajo la fórmula “Sociedad Patriótica” y
Guillermo Lasso, con el partido “CREO”.
Todo parece apuntar a
que de los tres candidatos mejor colocados el actual Presidente y candidato a
la reelección, Rafael Correa, podría ser reelegido en primera vuelta el
domingo. Para ello, necesita obtener más del 40% de los votos válidos y superar
en al menos el 10% al segundo más votado. De lo contrario sería necesario
recurrir a la segunda vuelta que se celebraría el 7 de abril.
Las encuestas son bastante
demoledoras y todas garantizan el triunfo de Correa, muchas de ellas en primera
vuelta, dejando a Lasso en un máximo del 20% y a Lucho en un 12%, mientras que
el actual mandatario superaría holgadamente el 50%. No obstante habrá que
validar dicha tendencia en la votación del domingo.
Correa ha presentado un
balance de su gestión bastante interesante tanto en el plano interno como en su
política exterior. Aún perteneciendo al grupo del ALBA (Alternativa Bolivariana
para las Américas) con Bolivia, Venezuela, Nicaragua, Cuba, etc., Rafael Correa
ha sabido mantener un criterio propio a la hora de abordar los problemas más
acuciantes de la República. Ha centrado su gestión en la necesaria y justa
redistribución de la riqueza, el crecimiento económico para la creación de
empleo, ampliación y mejora de la calidad de los servicios públicos,
especialmente la sanidad y la educación, devolver a las estructuras políticas
del Estado (Municipios y Provincias) las garantías de la buena gestión y
transparencia.
Rafael Correa ha sabido
ganarse el afecto de amplias capas de ecuatorianos. A pesar de su procedencia
de Guayaquil, Correa conoce a la perfección la realidad indígena andina, conoce
su idioma (Quichua) y las situaciones de pobreza y extrema pobreza que se dan
en el país. Durante su mandato ha corregido sensiblemente las estadísticas y
aplicado políticas globales de integración social, colocando a Ecuador en
niveles envidiables.
Muchos ecuatorianos
inmigrantes han regresado a su país, la mayoría motivados por la situación de
crisis económica mundial, pero sin duda alentados por los cambios reales que se
han operado en la realidad del Ecuador. Más del 70% de los ecuatorianos muestra
su aprobación sobre la gestión del mandatario.
Ecuador es un país muy
activo políticamente y las alternativas se van cocinando con el tiempo
suficiente para obtener buenos resultados. De ellas conviene señalar la apuesta
de Guillermo Lasso que, proveniente de la Banca y habiendo sido ministro en
varios periodos con anteriores presidentes, pretende agrupar al centro derecha
para hacer visible un cambio en los próximos años.
El domingo tendremos la
respuesta real de las urnas que nos dará una visión de continuismo en las
políticas aplicadas por el equipo de Correa o la voluntad de cambio en la
ciudadanía ecuatoriana.
1 comentario:
Hola Paco:
no tenía ni idea. ¿Cómo estás?
Espero que te mejores pronto, cuídate.
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