viernes, 26 de octubre de 2012

CHILE, HACIA 2013


El próximo domingo 28 se celebran en Chile las elecciones municipales para elegir a 346 Alcaldes y unos 3.000 concejales. El momento se presenta de suma importancia a la hora de constatar si los cambios políticos acaecidos en el país han cuajado entre la población de cara a las presidenciales del año próximo.

Hay que recordar que en las anteriores elecciones celebradas en 2008, la distribución de alcaldías fue de 145 municipios para la derecha, actualmente en el gobierno con Sebastián Piñera, mientras que la llamada “Concertación” obtuvo 147 alcaldías. Sin embargo, la aparición de nuevas propuestas políticas nos presenta un panorama muy distinto a tener en cuenta.

Por un lado, va influir en la elección el “voto de castigo” que pueda traducirse en un desapego al partido en el gobierno, lo que hace presumir que la derecha perderá algunas alcaldías. Por otro, la Concertación se presenta más dividida que nunca y solamente la sostienen los dos grandes partidos, socialistas y demócrata cristianos, quedando al margen un buen número de formaciones. Es importante señalar aquí, que dependiendo del número de apoyos con los que cuente la Concertación, es decir del grado de aceptación de sus propuestas, la ex presidenta Michelle Bachelet decidirá sobre su candidatura a las presidenciales del 17 de Noviembre de 2013.

Por último, cabe resaltar el enorme apoyo social con el que cuentan las propuestas y candidatos del nuevo partido de Los Progresistas, que encabeza Marco Enríquez Ominami, candidato presidencial de esta formación. Tienen la posibilidad no sólo de asumir alguna alcaldía sino de obtener representación en muchas de ellas y será un perfecto trampolín para la candidatura de MEO.

Los progresistas chilenos se han ido ganando el afecto de las capas sociales medias con un discurso novedoso, firme y cercano, muy alejado de las viejas formas de hacer política, que puede ser la sorpresa no solo en las municipales sino también de cara a las presidenciales, poniendo en jaque al bipartidismo.

De cualquier forma, el peso de las dos grandes formaciones políticas será notable y acapararán el mayor número de alcaldías en estos comicios. Será a posteriori cuando tengamos que sacar las conclusiones precisas de hacia dónde se encamina la política en Chile para los próximos años. La Concertación está agotada y la derecha disminuida, pero aún quedan figuras públicas con mucho peso en ambas coaliciones.


martes, 23 de octubre de 2012

MIRAR PARA OTRO LADO.


La situación que viven millones de jóvenes en nuestro país debería hacernos reflexionar sobre lo que está pasando y lo que nos espera en los próximos decenios. El sistema financiero se ha hecho con el poder manejando los hilos y directrices de la política, obteniendo la prioridad absoluta de los gobiernos occidentales y relegando a un segundo plano a las personas.

Llama la atención que en los noventa del siglo pasado la edad de emancipación estuviera situada en torno a los 23-24 años y que en la actualidad la misma se sitúe de media en los 30. Dándose la paradoja de que un buen número de aquellos que se independizan al poco tiempo han vuelto a su núcleo al haber reducido sus ingresos o simplemente haber perdido su trabajo. Se está produciendo una especie de “dejavu” en los jóvenes que aumenta su grado de frustración personal y retrotrae a los hogares a situaciones plurifamiliares.

Las políticas desarrolladas en los últimos años han conseguido llevar al desempleo al 50% de los jóvenes de nuestro país, muchos de ellos con una carrera universitaria concluida, que ven como sus posibilidades de salir de casa se les esfuma cada minuto.

Si no ponemos freno a esta situación de inmediato, creando mayores opciones de crecimiento económico, favoreciendo el empleo juvenil con planes específicos de incorporación al mercado laboral, tendremos un resultado de dos generaciones absolutamente perdidas. Ya vamos demasiado tarde para impulsar estas políticas pero si no lo hacemos caeremos en la recesión más absoluta poniendo en peligro el baluarte de la caja de la seguridad social, es decir, el pago de las pensiones de jubilación en los próximos años, abriendo así otro melón de gravísimas consecuencias.

Un país que tiene a la mitad de los jóvenes sin empleo y a muchos de los que trabajan en condiciones de total precariedad, es un país condenado al fracaso. Y no hablo sólo de la economía sino más bien de las personas. Jóvenes que están comprobando que viven en un Estado Fallido. Un Estado en el que comprobamos día a día como se van dilapidando todos los logros obtenidos desde la llegada de la democracia y que tanto trabajo y sacrificio costaron conseguir.

La banca es sin duda la gran culpable de esta situación, pero no debemos mirar para otro lado y reflexionar sobre la gravísima complicidad que las fuerzas políticas del llamado bipartidismo han mantenido durante este tiempo. Su miopía política, las prebendas, la casta y el poder por el poder, con absoluta ignorancia de la exigible previsibilidad para el buen gobierno, nos han llevado a la situación en que estamos. Y al final, los culpables seremos nosotros por no haber elegido bien a nuestros representantes en las instituciones públicas.

jueves, 11 de octubre de 2012

NACIONAL CATOLICISMO


Los nacidos en los años 60 tuvimos la desgracia de haber recibido una formación básica instruida por el Nacional Catolicismo imperante en la dictadura franquista. La formación del Espíritu Nacional, cantar el “cara al sol” cada mañana, rezar el ángelus a mediodía, participar de las muestras deportivo gimnásticas del primero de mayo y recibir, como dogma de fe, la españolización de la “Una, Grande y Libre”.

Reconozco que me costó reeducarme en los años siguientes a base de devorar libros y viajar por España y por todo el mundo, pero me cabe la duda de si el trauma se puede superar del todo. Hay algunos que, evidentemente, no se han recuperado y estaban deseando llegar al poder para intentar retrotraernos a la oscura etapa de la derecha reaccionaria, rancia, pérfida y fachosa.

El ministro Wert es una muestra de ello. No ya porque utilice cualquier cosa para desviar la atención de lo verdaderamente importante, la crisis económica, sino porque no se puede ser más inútil al plantearse en pleno siglo XXI, avanzado el segundo decenio, que el sistema educativo tiene que españolizar a los alumnos catalanes.

Me da la impresión que puede haberse pasado por alto algo que va implícito en la afirmación del honorable ministro. Si se trata de españolizar a los alumnos catalanes, ¿quiere decir que el resto de los españoles ya están españolizados? O dicho de otra forma, ¿cree de verdad el ministro que la educación en la España del siglo XXI debe dedicarse a españolizar en lugar de orientarse a educar?

Ya en democracia tuve un maravilloso profesor de literatura que me enseñó a distinguir entre los inteligentes y los idiotas. A los primeros se les detecta muy pronto, porque son personas afables, humildes, de mentes abiertas y capaces de variar sus pensamientos con su gran capacidad para escuchar. Los idiotas también son fácilmente reconocibles, porque siempre se aferran al pasado, utilizando viejos dogmas y sofismas que les resultan muy válidos para sentirse seguros, fuertes y prepotentes.

El Nacional Catolicismo debe quedar desterrado absolutamente de nuestra realidad como país. Ni es sano (mentalmente), ni ayuda a que las personas sean libres. Y que tenga que ser el ministro de educación el que vuelva a utilizar instrumentos de la vieja guardia pretoriana franquista, clama al cielo.

La marca España la hacemos todos, la construimos como sociedad, pero declaraciones como las de Wert la empobrecen, la ensucian, la menosprecian y la ridiculizan. Tiene que dimitir, irse, dejar la política, porque no podemos soportar tanta ignorancia.



lunes, 8 de octubre de 2012

CHÁVEZ HASTA 2019


El triunfo electoral en Venezuela por el candidato a la reelección, Hugo Chávez Frías, no ha sorprendido demasiado teniendo en cuenta la trayectoria de la política del mandatario bolivariano. La mayor parte de las encuestas previas lo apuntaban, pero se había ido creando una esperanza de cambio encarnada en el candidato opositor Henrique Capriles Radonski, que al final ha conseguido un 44% del voto el pasado domingo.

Una vez escuchados los mensajes al país de ambos contendientes, cabría resaltar algunos aspectos a tener en cuenta para el futuro inmediato en Venezuela. En primer lugar, que la diferencia entre vencedor y vencido no llega a los 10 puntos. Eso da una idea de la gran polarización que se ha producido en el país. Chávez ha acusado los muchos años de gobierno, su actitud prepotente y el daño de su enfermedad, mientras que Capriles ha sabido recoger el descontento de una buena parte de los venezolanos con unas políticas demasiado proteccionistas, populistas y con muchos puntos rojos en la política exterior.

Fruto de aquello, en segundo lugar,  puede considerarse que el domingo se consiguiera en Venezuela el mayor índice de participación en unas elecciones presidenciales, habiendo superado el 80% del censo. También indica el dato el alto interés por la política de los venezolanos cuestión que es de valorar en los tiempos que corren.

Un tercer aspecto a resaltar es la consolidación de la oposición como alternativa de gobierno, algo impensable en periodos anteriores. Es cierto que alguno pequeños grupos se separaron de la Unidad a última hora, pero ha quedado demostrado que la única forma posible de vencer a Chávez es mediante la fórmula de la unidad opositora. Tendrán que continuar trabajando en ello para plantear nuevas convocatorias electorales.

Por último, convendría destacar los resultados obtenidos en cada uno de los Estados de Venezuela, ya que el próximo 16 de Diciembre los venezolanos están llamados de nuevo a las urnas para elegir a los gobernadores de sus estados. Esta convocatoria debería ser fundamental para la oposición encabezada por Capriles, como un paso intermedio de consolidar la alternativa de cara al futuro. Conseguir el gobierno en el mayor número de estados posibles debe ser la estrategia inmediata de la Mesa por la Unidad.

El país aparece absolutamente fragmentado por el voto a ambos candidatos, pero tanto Capriles como, sobre todo, Hugo Chávez, tendrían que asumir como cuestión de estado la reconciliación nacional sin que ello signifique que Capriles se someta a rendición alguna, centrándose ahora en las regiones, pero abordando con responsabilidad de gobierno la necesaria paz social para avanzar todos juntos.

Se hace imprescindible la disminución inmediata de la violencia, recuperar la tranquilidad social y avanzar en democracia. Tres elementos muy importantes para la Venezuela de hoy.



martes, 2 de octubre de 2012

SECUESTRADOS


La situación de crisis se continúa profundizando con los últimos datos del paro, 4,7 millones, casi 80.000 más en septiembre, y con la presentación de unos presupuestos generales del estado absolutamente restrictivos, inviables e ineficaces.

Lejos de haber tomado nota de algunas sugerencias que se realizan desde diversos frentes, entre ellos el propio parlamento, Rajoy continúa impertérrito con su propuesta de recortes en busca de la reducción del déficit el año próximo. El descontento ya puede catalogarse de generalizado y, bajo mi punto de vista, acarreará un incremento en la protesta social al tiempo que el país se va directo a la ruina.

Da la sensación de que nuestro país ha sido secuestrado por alguien o algo, que nos impone una serie de condiciones que nos ahoga en estrecheces inútiles y que generan un desafecto de lo político, de las instituciones, engendrando una tristeza y miedo colectivo que puede reventar en cualquier momento.

Cuando es el propio gobierno del PP quien se convierte en cómplice necesario para favorecer el secuestro, el asunto ya se vuelve peligroso. La Unión Europea (fundamentalmente Alemania) exprime las condiciones de reducción del déficit y lejos de negociar mayores plazos temporales, reducción progresiva o simplemente alternativas financieras a bajo coste sin condiciones añadidas, se mantiene firme en sus condiciones. Pero para ejecutar dicha política necesita un colaborador y ese cómplice es Rajoy.

Escudado en su mayoría absoluta dada por los votantes españoles hace casi un año, Rajoy ha obtenido una especie de “patente de corso” con las condicionalidades europeas para llevar a cabo las política más regresivas y neoliberales conocidas en nuestro país. Lo que no quiere entender es que el descontento se generaliza por días y puede dar al traste con su opción de colaborador en el secuestro.

Vivimos en cierto estado de indefensión ante el bloqueo permanente de la apisonadora del PP que no acepta ni una sola de las alternativas planteadas por el resto de la cámara ni de los movimientos sociales. Y cuando una sociedad se siente indefensa puede recurrir al derecho a su defensa para evitar ser secuestrada con mentiras que atentan contra sus derechos fundamentales.

Rajoy es considerado hoy día por muchos medios internacionales como un “administrador fiduciario”, una especie de administrador de las colonias o gobernador de la ínsula a las órdenes de otros, aplicando las políticas que le indican sin escapatoria para los ciudadanos.

Pero todo tiene un límite. En primer lugar, Rajoy está aplicando políticas distintas a las expresadas en su programa electoral, luego mintió para conseguir el voto que le dio mayoría absoluta. En segundo lugar, si es colaborador necesario para el secuestro de nuestro país con una pérdida total de nuestra soberanía, es muy posible que esté cometiendo un delito de alta traición. Y, por último, si en realidad es administrador fiduciario, administrando la colonia europea de España, sus delitos contra la Patria son aún más graves, ya que además lo hace abocando a la miseria a millones de españoles.

Es urgente y necesaria la convocatoria de elecciones generales que determinen una nueva composición del parlamento, iniciar un nuevo proceso constituyente que acoja las reformas necesarias actualizando la carta magna actual y ser capaces de sumar el apoyo de toda la población en la orientación y compromisos que queremos para nuestro país en los próximos años.