viernes, 31 de agosto de 2012

¿QUIÉN PAGA LA CRISIS?


Iniciamos septiembre con la aplicación bestial de la subida del IVA por parte del Gobierno del PP. Rajoy acaba de prometernos que en 2013 no subirá más el IVA ni el IRPF, aunque dejando la postilla del “siempre que no sea necesario”, lo que deja a todas luces claro que volverá a subir los impuestos el año próximo.

Recordemos, (no hace falta ser muy mayor), que cuando un país siente la presión sobre su moneda suele recurrir al truco de la devaluación de la misma, potenciando el valor de sus exportaciones al hacerlas más competitivas y enfriando el consumo interno. España no puede recurrir en este momento a la vieja treta debido a su inclusión en la llamada “Zona Euro” cuya moneda solo podría ser devaluada por el Banco Central Europeo.

Para abordar la estrategia Rajoy, al igual que Zapatero, ha optado por devaluar el Euro en España vía disminución del poder adquisitivo. De ahí que los funcionarios hayan sufrido recortes del 5%, congelación salarial, desaparición de la paga extra de navidad, subido el IRPF, subido el IVA, incremento del pago por medicamentos, congelación de pensiones y un largo etc., que no reproduzco para no crear depresión psicológica.

Así, a groso modo, podemos estar hablando de una devaluación de nuestra moneda, o para ser más exacto de una pérdida del poder adquisitivo, en los últimos dos años del 30% real, incluyéndoles el 2,7% de inflación interanual actual. Es posible que no hayamos reparado en ello en el día a día de nuestros gastos y compras habituales, pero nuestro Euro, la moneda que utilizamos, cada vez vale menos. Es decir, el poder adquisitivo de las familias españolas ha disminuido considerablemente y amenaza con reducirse aún más en 2013.

Si a ello le sumamos que el desempleo español alcanza ya el 25,1% y el paro juvenil el 55%, el grado de desesperación aumenta, ya que no sólo tiene menos valor nuestro dinero sino que, además, disminuye de forma alarmante la posibilidad de obtenerlo.

Todo lo anterior ha sido provocado por una decisión política: el Partido Popular asume que la prioridad económica está en salvar a Sistema Financiero Español, es decir, bancos y cajas de ahorro, por lo que necesitará un rescate de la Unión Europea de hasta 100.000 millones de Euros, que pagaremos todos los españoles vía aumento de impuestos, reducción de servicios públicos y supresión de empleos.

Además de este rescate, que no hemos provocado los ciudadanos sino las entidades financieras, es el propio país el que recurrirá a un Rescate al Estado, que puede rondar los 300.000 millones de Euros y que incluirá nuevas condiciones, entre las cuales estarán, sin duda, la disminución de empleados públicos (no menos de 200.000), disminución de las pensiones y congelación de las mínimas, desaparición de subsidios y una vuelta de tuerca más a los servicios públicos en Educación y Sanidad.

Somos la ciudadanía la que al final va a pagar los platos rotos de años de políticas y políticos ineficaces, centrados en el derroche, y de cajas de ahorro y bancos manirrotos que son los verdaderos generadores del desastre económico en nuestro país. Personalmente no me siento responsable ni corresponsable de esta situación, como para tener que asumir que el valor de mi salario se devalúe en un 30%, pierdan calidad y cantidad los servicios públicos del estado del bienestar e hipotequen mi vida laboral, la de mis hijos y nietos, con tan nefasta política.

Los que han generado esta situación caótica deben pagar por ella. Banqueros y Consejos de dirección de Cajas de Ahorro (donde hay muchos responsables políticos), deben hacer frente a las repercusiones de su pésima gestión y, si no pueden, deben pagar por ello. Representantes políticos al frente de Ayuntamientos, Diputaciones, Comunidades Autónomas y Gobierno Central, que han malgastado o dilapidado el dinero público endeudándose hasta las cejas, deben de responder de sus desmanes y pagar por ello.

Ninguno de los ciudadanos ha sido consultado sobre determinados gastos o políticas que conllevaran endeudamiento extra en ninguna de las administraciones. Los únicos y últimos responsables son los cargos políticos que han tomado esas decisiones y son ellos los que tienen que dar la cara y asumir las deudas generadas.

No pueden, aunque lo pretenden, trasladarnos a la ciudadanía mediante el miedo social la corresponsabilidad de que entre todos tenemos que salir de esta patética situación. Al menos no lo pueden hacer hasta que no veamos entre rejas y con sus bienes hipotecados totalmente a banqueros y políticos responsables de esta quiebra económica. Si hace falta construir nuevos centros penitenciarios, adelante, que hay mucha mano de obra preparada.



jueves, 30 de agosto de 2012

CHAVEZ contra CHAVEZ.


Dentro de un mes se celebrarán las elecciones presidenciales en Venezuela para el periodo 2013-2019. El domingo 7 de Octubre, serán siete los candidatos a la Presidencia de la República, entre ellos un predicador que promete un millón de dólares para cada venezolano como reparto de los beneficios de  PEDEVESA y una empresaria panadera que no sabe bien lo que es la inflación ni el PIB.

Realmente dos van a ser los candidatos que se disputen la elección: El actual Presidente Hugo Chávez Frías, al frente del Gran Polo Patriótico, y Henrique Capriles, de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD). Ambos aparecen en  la gran cantidad de encuestas que se realizan en el país con un amplio respaldo de los electores encuestados.

Capriles cuenta con el apoyo de amplias capas sociales, desencantados del chavismo y opositores permanentes, que le colocan como firme candidato en la contienda. De las más de treinta encuestas realizadas hasta el momento, saldría vencedor en 5 de ellas, frente a las más de 25 en las que ganaría Chávez.

El principal contendiente de Chávez en estas elecciones es el propio Chávez. Por un lado, presenta una gestión digna de tener en cuenta en el contexto latinoamericano. Su dedicación a la salud, educación, alimentación y vivienda no sólo es incuestionable sino envidiada por los países del área y aceptada por el 75% de la población venezolana. La dedicación del 43% del presupuesto nacional a estos asuntos indican una clara tendencia hacia lo social que han tenido resultados en estos años de gobierno: Reducción de la mortalidad infantil en un 50%, erradicación del analfabetismo, 83% de matriculados en educación superior, sanidad y educación gratuitas, pensiones de jubilación generalizadas, disminución de la pobreza y de la deuda externa, reducción de las desigualdades, etc.

De otro lado, Chávez ha protagonizado los principales episodios de enfrentamiento contra todo y contra todos, con su presión omnipresente en los asuntos no sólo regionales sino mundiales. Su personalismo patriarcal y populista, patente en sus intervenciones en el “Alo, Presidente” o en cualquier evento, sus contantes rifirrafes con los medios de comunicación, su carácter bronco, el no haber sabido implicar en los procesos a la clase más pudiente del país, le acarrean una serie de enemigos y adversarios que serán los que pongan en peligro su reelección.

Observadores en la zona indican que Capriles nunca ganaría unas elecciones a Chávez, pero apuntan que puede ser el mismo Chávez quien se haga perder las elecciones. El manejo que realiza de su inmenso poder se ha visto contrastado con las secuelas de su enfermedad tratada en Cuba y que lo ha mantenido al margen real de la Presidencia durante un año completo.

Chávez se enfrenta en estas elecciones al propio Chávez, teniendo la oposición la posibilidad de dar un vuelco electoral en la figura de Capriles. Sería muy sana una alternativa política, pero Hugo Chávez presenta unos resultados difíciles de rebatir en lo social.

martes, 28 de agosto de 2012

LAS TROPAS A CASA.


De las misiones exteriores en las que participan nuestras Fuerzas Armadas, las de Afganistán y Líbano, no tienen mucho sentido mantenerlas. La primera, Afganistán, donde ya todo el mundo tiene fecha de salida y España mantiene finales de 2014 para hacerlo, cuando fácilmente podría salir del país a mediados del 2013 sin poner en peligro ninguno de los objetivos propios de la misión. Prolongar la permanencia significa aumentar las opciones de atentados habiéndose convertido los efectivos internacionales en blancos para las pruebas sobre terreno de la preparación de las guerrillas talibanas.

Es el ejército Afgano el que debe hacerse cargo de la situación sin más demora, contando con asesoramiento externo de algunos países (entre los que puede continuar España), pero sin presencia de las tropas con la estrategia de objetivos que mantiene en la actualidad. Ni tiene ningún sentido que sea de otra forma, al habar cambiado la situación geopolítica, ni tenemos por qué poner en riesgo innecesario a nuestras tropas.

En Líbano la realidad también ha cambiado desde que asumimos la participación en la misión de control del alto el fuego con Israel. Hoy día, el peligro inminente es la escala del conflicto Sirio y su extensión al Líbano, donde ya se están produciendo enfrentamientos en zonas de la capital. Nuestras tropas no tienen por qué permanecer durante más tiempo en las zonas delimitadas por la misión de Naciones Unidas. La misma debe ser revisada y modificada con la nueva realidad y no debe hacerse en base a las tropas que ya se encuentran sobre el terreno (pues estaban para otra misión), sino plantear el final de la misma con la retirada incluida y proponer nuevas acciones que puedan ser estudiadas por la comunidad internacional para concretar su participación.

Poner en peligro a nuestras tropas en una situación totalmente distinta a la que motivó nuestra participación en la misión es, cuando menos, temerario. Como temerario es escuchar algunas opiniones cercanas al Ministerio de Defensa quejándose de la utilización de nuestras fuerzas armadas dentro del marco de la proyección de la llamada “Marca España”.  Hemos de saber diferenciar los objetivos de dicha proyección con la implicación de nuestras Fuerzas Armadas en misiones desnaturalizadas, costosas y que ponen en riesgo la seguridad de nuestros soldados.

Ambos conflictos necesitan de un replanteamiento urgente que debería pasar, en nuestro caso, por la retirada inmediata de nuestras tropas. Naciones Unidas debe revisar de urgencia los objetivos a plantear en dichas zonas y los países participantes reubicarse en las mismas según sus posibilidades. El gobierno de Rajoy tiene que alejarse de grandes pretensiones (recortes), así como renunciar nítidamente a la utilización de la presencia de nuestras tropas para mejorar la marca. Eso pertenece a otras esferas de la vida política.

lunes, 20 de agosto de 2012

EL CULEBRÓN ASSANGE


La situación actual que vive Julian Assange amenaza con convertirse en un culebrón de larga duración. El conflicto diplomático creado entre el Reino Unido y Ecuador tiene muy difícil solución, a no ser que Ecuador decida nombrar a Julian representante diplomático ecuatoriano con un algún cargo internacional, hecho que según los acuerdos de Viena en materia diplomática darían por finalizado el asunto, permitiendo la salida del país del creador de Wikileaks de 41 años de edad.

Todos sabemos que la intencionalidad de Assange es evitar su extradición a Suecia (donde simplemente está llamado a declarar ni siquiera aún como imputado), ante la más que previsible opción del gobierno sueco de extraditarlo a Estados Unidos acusado de desvelar secretos de estado.

De este asunto me gustaría detenerme en dos puntos a considerar. El primero tiene que ver con la tímida reacción de los organismos internacionales (a excepción de ALBA y UNASUR), que prefieren mirar para otro lado porque saben que el asunto salpica sus propias vergüenzas. Cuando se desvelan todos los documentos de Wikileaks, en una experiencia única de transparencia informativa, descubrimos la violación de los Derechos Humanos realizada por EE.UU., con vuelos irregulares, secretos y apresamientos ilegales sin ningún tipo de defensa; el confinamiento vergonzoso en la base de Guantánamo con torturas y vejaciones, sin que las Naciones Unidas ni la Corte Penal Internacional hicieran lo más mínimo, no ya por condenar dichas acciones irregulares, sino ni siquiera por tomarlas a trámite para investigarlas.

El ridículo más espantoso de estos y otros organismos (la OEA y la propia Unión Europea que miró para otro lado y fue connivente con algunas acciones irregulares) pusieron al descubierto que Estados Unidos podía campar a sus anchas en la escena internacional y hacer realmente lo que les diera la gana o, dicho de otra forma, aquello que considerasen oportuno para salvaguardar su seguridad nacional.

Toda la comunidad internacional es corresponsable por no haber investigado y, en su caso, condenado las informaciones abiertas desde los documentos de Wikileaks.  Por eso tiene miedo Julian Assange, mucho más que fundado, a que su extradición a Suecia suponga un intento de escarmiento por parte de Estados Unidos que pediría de inmediato la extradición, corriendo el peligro incluso de enfrentarse a una condena ejemplar juzgado por una comité militar, ni siquiera con un juicio civil.

El otro aspecto a resaltar es el papel de Ecuador. La imagen internacional del presidente Rafael Correa no pasaba por sus mejores momentos después de las fuertes rencillas con los medios de comunicación del país, algunas de las cuales han terminado en los tribunales. Correa ha aprovechado lo mediático del tema para asumir la responsabilidad de no permitir el desenlace descrito arriba, evitando el escarnio de Assange y obteniendo, al mismo tiempo, un reconocimiento internacional que estaba bajo mínimos.

Sin duda Julian Assange habría valorado en qué Embajada debería solicitar asilo, eligiendo a Ecuador con la confianza de que su conocido Rafael Correa asumiría dicho apoyo. El Reino Unido se ha equivocado con sus primeras declaraciones de intento de toma de la embajada, pensando que Ecuador es un país pequeño, poco relevante para sus intereses y que tenían que mantener su imagen internacional de duros en este tipo de asuntos.

Y se ha equivocado porque, aunque Ecuador no es lo mismo que si se hubiese refugiado en la Embajada de Canadá o de Brasil, la opción ecuatoriana cuenta con el respaldo legal de la Convención de Ginebra, el apoyo de América Latina y la simpatía de la opinión pública internacional por lo que significa el arrope a un personaje que nos desveló en qué mundo vivimos y en qué condiciones de ilegalidades de Estados lo hacemos.

jueves, 16 de agosto de 2012

SIN CONSENTIMIENTO


La teoría del consentimiento social no es nueva pero está de máxima actualidad. Ante la situación política y económica que se da en el país y a pesar de la relativa proximidad de las elecciones que dieron mayoría absoluta al Partido Popular en Noviembre pasado, hemos de preguntarnos si el Gobierno de Rajoy cuenta con el “consentimiento” de la población española.

Dicha teoría viene a indicarnos que se puede obtener fácilmente el gobierno de un país controlando las fuerzas armadas, la justicia, la policía y los medios de comunicación. Esto han podido hacerlo dictadores (véase los resultados de la primavera árabe), sin contar con el consentimiento del pueblo. En democracia, una elección nos coloca a determinados partidos en el gobierno dándose ese primer consentimiento de la población a las políticas presentadas en los programas electorales.

Cuando un partido en el gobierno se desvía 180 grados de su programa y, como en el caso de Rajoy, nos manifiesta que el “no quisiera poner en marcha esas políticas pero que no es libre y que no tiene más remedio”, estamos ante una situación que ha de volver a contar con el consentimiento de la ciudadanía.

En democracia la elección tiene un periodo determinado para la ejecución de los programas del partido o partidos vencedores (en nuestro caso 4 años), pero el consentimiento de la aplicación de dichas políticas ha de ser refrendado día a día, máxime si han cambiado radicalmente las propuestas con su programa electoral. Es decir, el control político y ciudadano que ha de ejercerse sobre el gobierno es cotidiano y no puede ni debe refugiarse en el parapeto de haber sido elegido para un periodo completo.

La teoría de Bukowski, según la cual “La diferencia entre una democracia y una dictadura es que en una democracia, primero votas y después recibes órdenes. En una dictadura no tienes que perder el tiempo votando”, quedaría superada por lo expuesto arriba desde la perspectiva del consentimiento.


Es el pueblo soberano quien ha de estar vigilante a las tareas que desarrollan los políticos elegidos para su representación, día a día, medida a medida, otorgando el consentimiento a las mismas si es que aquellas se alejan de las propuestas electorales por las que se apoyó a un determinado partido.

 

En esta realidad nos movemos en España, con un gobierno de mayoría absoluta que se aleja de su programa electoral y que pierde el “consentimiento” de la población en la aplicación de sus políticas. Una opción sería la de someter a referéndum el paquete de las propuestas no programáticas y otra, la más certera, sería convocar de nuevo elecciones para revalidar o no el apoyo directo de los ciudadanos.

 

 

 


sábado, 11 de agosto de 2012

MIEDO SOCIAL


Una de las tácticas a utilizar dentro de la estrategia del “tenemos que apretarnos el cinturón”, es la de trasladar a la población tales situaciones de angustia vital que consigamos un cierto nivel de dudas que obtengan como resultado su paralización.

Esto no es nuevo, ni mucho menos. Ya ha sido utilizado en varias situaciones críticas de la historia moderna y clásica, donde la posibilidad de que las cosas fueran a peor y cercar a las poblaciones con el mensaje de que “lo que podría venir sería el abismo”, dieron su justo resultado: un grado de aceptación de la situación estranguladora por el miedo trasladado al caos total.

Este escenario dibujado en nuestra España actual, absolutamente manejado por el Partido Popular con cierto nivel de éxito, ha sido puesto en práctica desde el mismo día de la toma de posesión de Rajoy. Discurso: “Mirad cómo nos han dejado los socialistas manirrotos el tesoro público”,“ahora nos toca a nosotros sacar de nuevo a España de la miseria”, “para ello vamos a tener que tomar medidas que no son populares y que incluso van en contra de nuestro propio programa electoral”, “no soy libre para tomar las medidas que estamos tomando”, “la situación es crítica y tenemos que hacer esfuerzos para salvar nuestra economía”, etc., etc…

La estrategia es trasladar a la ciudadanía tal grado de ansiedad e inseguridad, que la preocupación por lo particular supere con creces a las inseguridades colectivas. Grupos familiares concentrados en lo suyo disminuirán la presión en las calles sobre lo nuestro.

La farsa de todo ello se encuentra en las propuestas paralelas, que no se esmeran en esconder, como la nueva ley sobre el aborto, la presión xenófoba en las prestaciones sanitarias a indocumentados, potenciar  la sanidad y educación privadas, desprestigiar lo público y poner en cuestión la efectividad de la propia democracia representativa de los partidos denostando su capacidad de acción.

Escenarios como este han dado lugar a lo largo de la historia a la posibilidad de aparición de líderes populistas, a veces golpistas sanguinarios, que han encontrado abonado el terreno para “salvar a la patria”.

La ciudadanía tenemos que aprovechar la ocasión para hacer una reflexión en profundidad sobre nuestro papel en esta historia, una historia que sin duda nos avanza un cambio de paradigma. Lejos de amedrentarnos hacia el interior hemos de propiciar más que nunca la reflexión común, analizar y buscar alternativas justas y democráticas a esta situación.

De momento superar el miedo que nos han querido meter hasta el tuétano, pero inmediatamente ponernos a PENSAR de qué forma podemos cambiar esta realidad que enmascara el estrepitoso fracaso de un capitalismo salvaje que nos utiliza como verdaderas cobayas. Quizás podríamos comenzar colocando a cada uno en su sitio y asumiendo nuestras propias responsabilidades como ciudadanos.

sábado, 4 de agosto de 2012

EL DOLOR SIRIO.


Agosto será un mes decisivo en la resolución del conflicto en Siria. Las autollamadas y aceptadas (tanto por los medios de comunicación como por la comunidad internacional) “fuerzas rebeldes”, realizan duros ataques en varias ciudades del norte y centro del país. En algunos barrios de la capital se comienza a luchar calle a calle, mientras que en la segunda ciudad siria, Alepo, los combates son encarnizados, utilizando el ejército los bombardeos más o menos indiscriminados.

Mientras Kofi Annan ha tirado la toalla, ante la imposibilidad de mediar en el conflicto, el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas continúa sin encontrar la fórmula que comprometa a los representantes en una solución pacífica y duradera. Se convierte en una “Misión Imposible” restablecer las opciones de un acuerdo que encuentre un camino hacia la paz.

Contando con un número de víctimas en aumento, cada día más indiscriminadas, hay que volver a exigir a la comunidad internacional un último esfuerzo para solucionar de forma dialogada el conflicto. Hemos de tener en cuenta algunos factores en esta especie de continuación de la primavera árabe, que sin embargo ha contado con algunas diferencias sustanciales con las ocurridas en el resto de países mediterráneos.

Rusia y China continúan negándose a apoyar una intervención internacional, que sin embargo se viene dando de facto. A nadie se le escapa que la CIA y el MOSSAD han optado en esta ocasión por dotar militarmente a los rebeldes con armamento de distintas proporciones, municiones y pertrechos militares. Turquía, socio de la OTAN, ha servido de corredor para la dotación de armas ante los temores de Israel por la posible utilización de Al Assad de las armas químicas.

La opción utilizada por los países de apoyo a los rebeldes en esta ocasión, ha sido la de no mancharse directamente en el conflicto, para asegurar su éxito evitando reacciones en cadena que pudieran perjudicar la seguridad en Israel. No han dudado para ello en generalizar la guerra en territorio sirio, aún a sabiendas de que ello perjudicaría a la población civil, a la que se viene utilizando como escudo humano por ambos bandos cada vez con mayor número de víctimas.

No cabe duda que son muchos los intereses geoestratégicos que se juegan en la zona y que son dichos intereses los que realmente ordenan el escenario bélico y los posicionamientos internacionales. Es lo que ha denunciado Annan para renunciar a su misión especial para Siria.

El conflicto amenaza con extenderse hacia Líbano e Irán, verdadero objetivo de occidente, y debería ser este extremo la principal preocupación de las Naciones Unidas. Sin embargo, una vez más, asistimos a la débil fortaleza de la ONU para la resolución y/o prevención de conflictos. Personalmente, sólo me preocupa la suerte que correrán cientos de miles de sirios cercados en un conflicto creado artificialmente por los países que hace poco tiempo eran amiguísimos del presidente Al Assad.

jueves, 2 de agosto de 2012

LA JUNTA DE ANDALUCÍA


Las obligaciones emanadas del Consejo de Política Fiscal y Financiera del pasado martes, son a todas luces absolutamente irresponsables con la situación económica de la Junta de Andalucía. En lugar de plantear el gobierno del Partido Popular un respetuoso y escrupuloso ajuste de deuda, en base a los esfuerzos y endeudamiento de las Comunidades Autónomas, ha decidido tirar por la calle de en medio perjudicando notablemente a la Junta en Andalucía.

Dicho esto, el gobierno mix de la izquierda andaluza, se ha apresurado a indicar tres cuestiones que al menos merecen un pequeño análisis:

n  El Gobierno Andaluz planteará un recurso al Tribunal Constitucional sobre los acuerdo del Consejo citado, paralizando así la aplicación del mismo.

n  Griñán vuelve a engañarnos cuando justifica su negativa a un recorte impuesto de 2.700 millones que afectarían al cierre de los 19 hospitales andaluces, o a 2.000 centros escolares, o a ¼ del personal de la Junta. Miente porque sobradamente sabe que se podría recortar de otros gastos de la Junta, no necesariamente de los citados, aunque los utilice con su demagogia populista para continuar con enfrentamiento particular con el Gobierno del Estado.

n  Patético que el tándem Valderas-Griñán, quieran vender el asunto con una declaración de guerra económica a los andaluces y a las andaluzas, una afrenta al pueblo andaluz. Andalucía no es la Junta de Andalucía, asunto este que nunca ha llegado a comprender el PSOE (que sigue manejando concepto de cortijo) ni ahora Izquierda Unida, pues pareciera que entrar en el gobierno crea tendencia.

Durante más de 30 años la izquierda en Andalucía ha gobernado como auténticos despilfarradores manirrotos, sin pensar en el mañana, sin planificar sus estrategias, improvisando para gastar unas arcas bastante repletas. Ahora se encuentra con las arcas cuasi vacías y recurren a la afrenta política territorial (Andalucía frente a España) para ocultar su verdadero objetivo partidario declarado por Elena Valenciano después de las elecciones de marzo: Desde Andalucía comenzará la reconquista de España para el PSOE.

Los andaluces y andaluzas no vamos a permitir más que ningún gobierno central manipule y ejercite la desigualdad con nuestra comunidad. De ninguna manera. Pero al mismo tiempo no vamos a consentir que estos irresponsables del gobierno andaluz se parapeten detrás del escudo del Pueblo Andaluz, para sus batallitas particulares. No engañen por más tiempo a la gente. No se les ha votado para eso.

A Griñán se le ha escapado que el no piensa adelantar las elecciones en Andalucía, por mucho que se vea acorralado por el gobierno central del PP. Afirmación que ha levantado todas las alertas sobre una posibilidad que permanecía oculta y que cobra cada vez más visos de convertirse en real. Si el gobierno del PP achucha con las medidas económicas Griñán tendrá que convocar elecciones en Andalucía y es muy posible que eso ocurra antes de cumplir un año de gobierno de la izquierda mix.