A un mes de que Susana
Díaz sea investida Presidenta de la Junta de Andalucía por la modalidad de la
herencia, han comenzado las negociaciones con su socio de gobierno, Izquierda
Unida. Con las pieles un poco más morenas por el implacable Lorenzo, el
autodenominado “gobierno de izquierdas” (suena a frente popular), está en el
toma y daca de ver quién puede más tensando la cuerda pero no mucho, porque
ninguno de los dos quiere que se rompa.
A Izquierda Unida le
interesa la convocatoria de elecciones anticipadas a sabiendas de que el
resultado le favorecerá y tendrían mayores cotas de poder en un futuro gobierno
de coalición. Pero al mismo tiempo saben que no pueden ser ellos los que rompan
la baraja sino que tienen que intentar que sea la heredera quien la rompa.
Ambos saben que la ciudadanía castigará a quien dé el paso de romper.
Izquierda Unida va a
exigir en el pasteleo más competencias y, sobre todo, más dinero para la
gestión (actualmente no gestionan ni el 10% del presupuesto total de la Junta).
Posiblemente, la heredera, diga que sí, que sin problemas. Un poquito de aquí,
otro poquito de allá y listo. Todo sea por mantener un proyecto de acuerdo
social-comunista para Andalucía. O dicho de otra forma, nos repartimos los
sillones y competencias porque lo que importa es el fin no el medio.
Con la tragadera ancha,
la de no tenemos más remedio que soportarnos, una Susana acorralada puede dar
un giro a los pocos meses y utilizando el impuesto déficit del 1% para los
presupuestos del 2014, echarle la culpa al gobierno central de la imposibilidad
de aplicar más recortes en Andalucía y convocar elecciones anticipadas
haciéndolas coincidir con las Europeas en Mayo próximo. Si la cosa se tensa en
la negociación con su aliado incluso es posible que piensen en el 28F para
convocar a elecciones.
Izquierda Unida va a
intentar sacar la máxima tajada de la debilidad de la heredera, pero son
conscientes de que la decisión final de disolver y convocar tiene que darla el
PSOE. Por eso, podemos asistir incluso a un pacto renovado que quiera
plantearse agotar la legislatura, siempre y cuando a la heredera le venga bien
para popularizar su imagen personal y postularse con mayor reconocimiento
social.
Los andaluces,
mientras, viéndolas venir. A muy poca gente le importan estas marrullerías de
pactos y pasteleos. Ambos partidos llevan meses sin hacer nada por Andalucía y
por sus problemas fundamentales. Se están mirando el ombligo y jugando la
partida de ajedrez del reparto de poder sin aplicar políticas públicas serias
que modifiquen la realidad del califato.
El Parlamento Andaluz
está en encefalograma plano. Las propuestas de Gobierno llevan tiempo en la UCI
y estancadas. Los servicios públicos ni avanzan ni mejoran. Los andaluces
opinando que el 50% no irá a votar. Mientras el PP dormido y sin alternativas y
los socios de gobierno peleando por vez quién se lleva el gato al agua. Qué
vergüenza.
1 comentario:
Estimado Paco: me parece muy poco respetuoso que denomines a la próxima Presidente de la Junta de Andalucía "la heredera". Estamos en un sistema parlamentario y no presidencialista y será el Parlamento Andaluz quien la elija, con la mayor legitimidad. Te recuerdo que desde UPyD Andalucía propusimos una moción en el Programa Marco 2011 para la elección directa de los Presidentes autonómicos y que Nacho Prendes (ponente) propuso su rechazó en un Consejo Político, como efectivamente ocurrió. Un saludo.
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