LULA 2014, BACHELET A LA ONU

Las últimas gestiones de mediación de Lula Da Silva ante el gobierno de Irán, con su apoyo al programa de enriquecimiento de Uranio y descalificando la gestión de la OIEA (Organización Internacional de la Energía Atómica), no han sentado nada bien ni a las Naciones Unidas ni a Estados Unidos, quien ha puesto un veto internacional explícito a la carrera meteórica de Lula a la Secretaría General de las Naciones Unidas. Lula ha valorado muy bien sus pasos y sabe perfectamente que gane su partido las próximas elecciones presidenciales de septiembre en Brasil o las pierda (cosa que aparece como probable), él puede ser el candidato para 2014 después del descanso constitucional obligado. Así las cosas, cobra fuerza la segunda alternativa en cartera para el desempeño de la Secretaría General de la ONU. Esta segunda alternativa contaba con las variables de que fuera ocupada por primera vez en la historia de la Organización por una mujer; en segundo lugar, que fuera de América Latina (ya tocaba después del peruano Pérez de Cuellar). Todas las papeletas las tiene Michelle Bachelet, quien fuera presidenta de Chile hasta diciembre pasado. La fragmentación de la concertación tras la pérdida de las elecciones presidenciales a favor del empresario Piñera, las dotes reconocidas de la ex presidenta de diálogo, consenso y apertura, su grado de reconocimiento en el ámbito europeo y, sobre todo, latinoamericano, sitúan a Bachelet como una firme candidata a ocupar el puesto. Aún queda demasiado tiempo para que se materialice el nombramiento, en concreto hasta finales de 2011, pero las quinielas ya han empezado a saltar y las apuestas favorecen la opción. Ni corta ni perezosa la Sra. Bachelet ya se ha dejado caer con sus primeras declaraciones sobre la posibilidad, mostrándose como los taxis “libre disponible”. Aguantar en secano hasta diciembre de 2013 es demasiado tiempo y a nadie le amarga un dulce. Así las cosas, es muy posible que para enero de 2012 contemos con una mujer al frente de la ONU, con un perfil más político que el actual Secretario General, pero al mismo tiempo con grandes dotes para el oficio. Piñera debe estar encantado con la opción ya que Bachelet salió muy bien valorada de su mandato e índice de popularidad en Chile y amenazaba con presentarse en 2013 a las elecciones chilenas pudiendo arrebatarle la presidencia. Así que cuanto más lejos mejor. Independientemente de las lecturas en clave interna lo que me parece realmente importante es que la Secretaría General de las Naciones Unidas pueda recaer en una mujer. Bachelet pasaría a la historia mundial y en principio no lo haría nada mal.