Es curioso ver cómo los poderes
políticos, económicos y de los medios de comunicación se ponen de acuerdo para
arremeter contra la opción que pueda representar Podemos en el panorama
político español. Todo parece orquestado y diseñado como si de una conspiración
conjunta se tratara.
En los partidos políticos, aunque
sus estrategias son variopintas, prevalece un miedo terrible a “perder” sus
espacios de poder y privilegios asentados durante tantos años. Desde la derecha
rancia, que ha puesto a sus primeras espadas al servicio de la causa, hasta un
PSOE en vías de extinción, una Izquierda Unida que ha optado por reinventarse
intentando pegarse para no desaparecer y el partido de Rosa Díez, que comienza
a perder apoyos.
Les preocupa, a los de siempre,
que la gente cabreada, indignada, cansada por su ineficacia oscurantista, pueda
organizarse, plantear alternativas fuera de lo que ellos consideran los cauces
habituales, su santa tradición. Han creado sus estructuras partidarias, que
acaban convirtiéndose en empresas políticas, con escasa militancia activa y
mucho cargo público. Dinámica que está en peligro si prospera una nueva forma
de entender y de hacer política.
La opción de Podemos, supone un
riesgo real para los poderosos de siempre que han ido destruyendo este país a
golpe de ocurrencia y corrupción. Un riesgo para las clases económicas más
poderosas que han campado a sus anchas por despachos ministeriales, comunidades
autónomas y ayuntamientos, haciendo sus agostos hasta en febrero durante
treinta y cinco años. Un riesgo para las élites acomodadas que han vivido bien
tanto con el PP como con el PSOE y que, de ninguna manera, quieren ver en
peligro sus privilegios. Un riesgo para todos aquellos que se han aprovechado
de lo público, de lo que es de todos, a los que se les puede acabar la
mamadera, el negocio y el latrocinio.
La conspiración acaba se puso en
marcha el mismo día 25 de mayo al conocerse los resultados electorales de las
europeas. Ahora, Podemos, tendrá la responsabilidad de saber organizarse, ser
capaces de dar respuesta a las demandas reales de la sociedad española,
construir un nuevo futuro y constituirse en la verdadera alternativa para la
caduca política española. No va a ser fácil, no se lo van a poner fácil y van a
sufrir ataques brutales desde todos los poderes establecidos. Aunque de momento
esos ataques no hacen sino darles más apoyos y votos para el futuro inmediato.
Por eso le tienen tanto miedo y
atacan ferozmente la opción de cambio. Los analistas políticos ya hablan de un
antes y un después del 25 de mayo de 2014. Los de la conspiración, también. Los
cambios vienen de abajo y nunca a los de arriba les ha gustado eso.
1 comentario:
Buena reflexión al respecto de lo que en parte representa Podemos y digo en parte porque, Podemos ha sabido canalizar el cabreado, el desahuciado, el harto, entre otros... gente que no se ha leído o preocupado de lo que propone Podemos o de los regímenes dictatoriales que Iglesias y Monedero alaba y defiende como modelo ha implantar en España, sin olvidar las justificaciones y el juego que tienen con los amigos de la ETA, pues aunque Podemos condena la actividad de ETA, Pablo Iglesias y Juan Carlos Monedero no se atreven a decir que los Etarras son asesinos.
Es por eso que creo que Podemos no representa a una mayoría de Españoles, pues una gran parte de los que le han votado no se han enterado de lo que Podemos oculta en la trastienda.
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