ELECCIONES: !YA!

Las medidas económicas presentadas el miércoles por el presidente del gobierno para la reducción del déficit público, muestran lo que hemos venido diciendo durante meses al respecto de la absoluta ineficacia del actual gobierno para afrontar los retos de la salida de la crisis. Hacer recaer el peso de la reducción sobre funcionarios, jubilados, dependientes, madres y cooperación al desarrollo de los países empobrecidos, es sin duda un golpe de timón a las tan cacareadas políticas sociales en las que se escudaba el PSOE. En el primer mandato de Zapatero, los socialistas gastaron a manos llenas sin planificar una economía que ya se sentía ajustada. En las comunidades autónomas que regentan hacían lo mismo y además daban la pauta para que ayuntamientos y diputaciones provinciales se pudieran endeudar hasta los ojos. El problema no es de las propuestas que ahora plantean, sino de la absoluta irresponsabilidad de un presidente de gobierno que no ha sabido o no ha querido actuar a tiempo. Primero negando la mayor, es decir, que estábamos en crisis, lo que motivó una pérdida de tiempo en la reacción de al menos un año; y, segundo, porque no ha sido capaz de generar un clima de consenso entre las fuerzas parlamentarias a modo de pacto de estado, limitándose a poner en marcha medidas tibias que como aspirinas pretendían neutralizar un avanzado cáncer llamado déficit público. La ciudadanía ya está cansada de tanta improvisación y de tanta dejadez y así lo demuestran en las incontables encuestas que se realizan, donde el número y porcentaje de abstencionistas crece como la espuma. Pero habida cuenta de que tanto a PSOE como a PP sólo le interesan los porcentajes que ellos obtengan en las elecciones, despreciando la abstención, nos encontramos con la realidad de que actualmente más de 10 millones de electores se quedarán en su casa en unas elecciones generales. Por lo tanto, hemos de hacer un esfuerzo de responsabilidad ciudadana por revertir esta situación que nos está colocando como país en la cola de Europa y en los primeros puestos internacionales para volver a convertirnos en receptores de ayuda de cara a evitar la situación griega en nuestro país. La solución sólo puede venir dada por un respaldo mayoritario de los electores a otras opciones políticas que no sean ni el PP ni el PSOE-IU, ya que ambos frentes han demostrado su absoluta ineficacia para resolver los problemas que realmente preocupan a los españoles. Y dicho respaldo puede y debe ser asumido por UPYD, el partido de Rosa Díez, que ha demostrado en este tiempo la capacidad para proponer las necesarias reformas en el país que consigan una regeneración de la democracia, replanteen el modelo de estado que tenemos absolutamente desvertebrado y recupere la ilusión ciudadana en lo político, ilusión que los actuales mandatarios de gobierno y oposición se han encargado de dilapidar. Todavía nos queda la esperanza de que esto pueda cambiar, desterrando de la acción política a los que mantienen el discurso de representantes y representados, en lugar de aceptar como un mandato ciudadano su elección para la ocupación de un cargo público con la responsabilidad de solucionar los problemas del país. Los ciudadanos deben tener la palabra para decidir qué rumbo debe tomar España. Por ello es imprescindible, urgente y necesario, que el gobierno disuelva las cámaras y convoque elecciones anticipadas ya. Día que pase será un día perdido en la construcción de alternativas serias para el país.