NO ROBAR, NO MENTIR, NO SER FLOJO

Los sondeos electorales, de cara a las municipales del próximo año, ya están haciendo su aparición pagados por los partidos y con el objetivo de ir creando tendencia de voto para garantizarse su “éxito”. En Málaga, el Partido Popular se jacta de que su último sondeo revalida la mayoría absoluta de Francisco de la Torre, con un concejal más que en las elecciones de 2007. Bueno, según Arenas, un concejal más, o dos, o tres, por subir que no quede. A nivel de Andalucía, su encuesta propia, les indica que ganarán en todas las capitales de provincia y en los municipios más importantes de la región, lo que les dará también el poder de gobierno de las diputaciones provinciales y en la Comunidad Autónoma. A la hora de presentar dichos datos, es cuando descubrimos los verdaderos intereses que mueven a los partidos mayoritarios en esta contienda municipal. Los municipios les importan bastante poco y el match se plantea como los preliminares del verdadero combate por ganar el gobierno de la Junta de Andalucía y del gobierno de España. Pero es que además no se cortan al trasladarlo a los ciudadanos. Han dejando claro, tanto PSOE como PP, que esta es una lucha por el mantenimiento de su status político y lo que se juega no es el bienestar de los ciudadanos, la lucha contra el desempleo, las medidas necesarias para vivir mejor, la mejora de la salud y la educación, el incremento de nuestros niveles culturales, el construir un país más saludable, justo y democrático. Nada de eso. Lo que está en juego es ver quién gobierna las distintas administraciones públicas. Dicho de otra forma, vamos a entrar de nuevo en una vorágine electoral donde el objetivo será la obtención de la “representación“ de los electores, para contabilizar dicho apoyo en las luchas por la alternancia en los gobiernos autonómicos y estatal. Los unos refugiándose en el discurso de las dos Españas le sacarán punta al lápiz de Garzón y del Gurtel, los otros removerán Roma con Santiago para poner en marcha el ventilador que esparza la escoria sobre su oponente. Y unos por otros, la casa sin barrer. El efecto mediático que han tenido estas palancas de marketing político les ha dado resultado hasta ahora y por eso no piensan en cambiarlo. De hecho cuando todo parecía perdido parecen recuperarse de la nada y ya saben ustedes que en las lecturas de los resultados electorales todos salen ganadores. Lo cierto es que ya estamos bastantes cansados de que esto sea así. De que nos veamos abocados a tener que elegir entre lo malo y lo menos malo según el momento. Y como cada vez nos dejamos engañar menos por estos políticos del tres al cuarto, que han mentido a la ciudadanía hasta el hartazgo, buscaremos otras fórmulas para regenerar la vida democrática en el país. Seremos los electores los que pongamos a cada uno en su sitio. Les propongo seguir la máxima de los pueblos Aimaras de la América Inca para orientar su voto y que el partido que no cumpla con las tres orientaciones básicas indias no sea merecedor de su apoyo: Ama Sua, Ama Llula, Ama Quella; es decir: No robar, No mentir, No ser flojo. Si todos tomásemos en cuenta las orientaciones indígenas para orientar nuestro voto, otro gallo nos cantaría.