BRASIL SE LA JUEGA: ELECCIONES 2010

El próximo 3 de Octubre se celebrarán elecciones Presidenciales, Legislativas y a Gobernadores en la República Federal de Brasil. Tras el obligado paréntesis constitucional de Lula da Silva, quien no podría presentarse hasta las elecciones de 2014, las candidaturas que cuentan con mayor apoyo son las siguientes: De un lado, la del Partido de los Trabajadores (PT), quien presenta arropada por Lula a su candidata a la presidencia Dilma Rousseff, que ha sido Ministra de la Casa Civil de Brasil desde 2005. Esta economista de 63 años, si bien comenzara las encuestas desde principio de este año con una escasa intención de voto, ha ido subiendo en las mismas con el impulso del Gobierno de Lula, hasta situarse actualmente en un 40%. En segundo lugar, aparece José Serra, del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB) perteneciente a la internacional democristiana, que ha sido Diputado Federal, Ministro de Planificación (98-02) y Gobernador del Estado de Sao Paulo hasta 2010, puesto al que renunció para candidatear a la Presidencia del país. También economista y con 68 años, mantiene una intención de voto fija en todas las encuestas de un 35%, lo que da mucha solidez a su candidatura. Por último, en tercer lugar, tendríamos a Marina Silva, ambientalista de 52 años, quien ha sido Ministra del Medio Ambiente con Lula de 2003 a 2008, fecha en la que dimitió, pasando en Agosto de 2009 al Partido Verde, después de abandonar el PT. El Partido Verde cuenta en la actualidad con 13 diputados federales, habiendo obtenido en las elecciones de 2006 un 3’6% de los votos. Según las encuestas para octubre Marina Silva podría obtener un resultado superior al 10%, colocándola como la opción decisoria en caso de celebrarse una segunda vuelta de las presidenciales el 31 de Octubre. De estas tres candidaturas principales (el resto se difumina en varios partidos muy minoritarios), quizá la que tiene mayor peso institucional es la Dilma Rousseff, que está siendo casi aupada por todo el aparato del gobierno de la República, y en quien Lula confía plenamente. Pero sin duda la que tiene mayor popularidad (que no tiene nada que ver con la intención de voto) es la persona de Marina Silva, quien estuvo casada con Chico Mendes, ambientalista asesinado en diciembre de 1988 por terratenientes, y que es recordado y admirado por la población brasilera. A pesar de que el Partido Verde apoyó a Lula en el primer periodo de su mandato, en el segundo le retiro su confianza centrándose en su política de defensa de la sostenibilidad, con tintes socialdemócratas y un fuerte espíritu regenerador de la política brasileña. Por su parte, Serra representa la vuelta al gobierno de los seguidores de Fernando Henrique Cardoso, antecesor Presidente a Lula, que no dejó un excesivo malestar entre la población del país y que presenta una batalla dura a la candidatura oficialista del PT en su propuesta de continuidad. Serra, sin embargo, tiene su techo de intención por debajo del PT. De ahí que todo parece apuntar a que será necesaria la celebración de una segunda vuelta.