viernes, 5 de agosto de 2011

EL MOMENTO DEL CAMBIO

Decía Gandhi que “Nosotros mismos debemos ser el cambio que deseamos ver en el mundo” y utilizo la reflexión de H.G. Wells sobre el tema: “¿Por qué se ha de temer a los cambios?, toda la vida es un cambio”. Todo parece apuntar, si no lo impiden los mercados, que las próximas elecciones generales se celebrarán el 20 de noviembre. Momento decisivo para la democracia española que necesita un cambio en su orientación, en sus políticas y en sus políticos. Durante los años transcurridos de este periodo democrático, hemos podido comprobar cómo PSOE y PP han colaborado mutuamente en el deterioro institucional, convirtiendo en un mercadeo permanente las políticas públicas en beneficio partidario, alejándose cada vez más de los intereses y problemáticas de la ciudadanía. Nosotros, los ciudadanos, hemos sido corresponsables de esta situación, no sólo con nuestro voto sino también con nuestro silencio y asunción de que continuábamos en el discurso de las dos Españas. Hemos descargado nuestra indignación pero al final siempre nos llevaban al callejón que a ellos le interesaba en su discurso tradicionalista y clásico, para evitar que gobernaran los otros, reclamando un voto útil para después hacer lo contrario de lo que indicaban sus programas electorales. Ya hemos aprendido la lección y corresponde de nuevo a los electores tomar la determinación de enderezar el rumbo de la política española, observar y analizar con la lupa de la responsabilidad qué es lo que necesita el país, cómo hemos de plantear la política para los próximos años (no sólo 4), qué partido está defendiendo realmente los intereses generales de todos, cómo podemos incidir en el cambio tan necesario. La respuesta a estas preguntas yo las he encontrado en Unión, Progreso y Democracia, UPYD, un partido joven, dinámico, moderno, que ha formulado toda una serie de propuestas que vienen a regenerar la vida democrática española, huyendo de mensajes mesiánicos y estrangulaciones de la democracia. Propuestas que coinciden plenamente con lo que piensa la gente en la calle y que ha demostrado su capacidad para defenderlas en las instituciones donde tiene representación. UPYD no tiene ningún miedo al cambio, porque es el cambio. No se asusta al mirarse al espejo, porque se reconoce en lo que ve, lejos de lo que le ocurre a las opciones que ya han demostrado su gran capacidad camaleónica para disfrazarse hasta de lagarterana si hiciera falta, exclusivamente para mantenerse en el poder. Cambio no es alternancia sino alternativa real y eso ya lo han aprendido los ciudadanos. No vale votar a uno que nos parezca menos malo que el otro, sino optar por aquello que creamos más cercano a la realidad de nuestro pensamiento, aquello que se ajuste más a una respuesta global, sin parches, que necesitamos de forma urgente en el panorama político de nuestro país. El voto útil será aquel que se deposite con la tranquilidad y satisfacción de haber optado por lo correcto, por lo deseable, recogiendo una sonrisa cuando salimos del colegio electoral. Para cambiar las cosas hemos de asumir nuestro deseo de hacerlo, juntos podemos y lo haremos por responsabilidad con la situación del país, mirando al futuro y con la alegría necesaria de quien sabe que no todo está perdido.

1 comentario:

J. Rubio dijo...

Este cambio que describes es imprescindible en la España actual, pero mucho me temo que se producirá mínimamente. Efectivamente amigo Pineda, una gran parte de los españoles van a las urnas como a un partido de futbol: esperando que gane su equipo aunque sea en el último minuto y de penalti injusto. Un mínimo parcentaje se plantea el voto, el resto lo tiene decidido por décadas. La sociedad civil española es casi inexistente (como lo prueba la escasa participación en el movimiento 15M y en nuestro propio partido, que no deja de ser un movimiento de indignados)lo que dificulta el cambio hacia una posición crítica. No obstante estoy en total acuerdo contigo y dispuesto a pelear para conseguir grupo parlamnentario en el Congreso, nuestro gran objetivo el 20N.
Un abrazo desde Cantabria.
Joaquín Rubio Soler
Consejo Político UPyD
CT-Cantabria