BIENVENIDA, MRS. OBAMA

Con los calores de Agosto ha llegado a la Costa del Sol la Señora Obama y su hija pequeña, así como un número indeterminado de amigos de la familia, equipo de seguridad correspondiente, servicio de atención, logística, etc. Nos recordaba la época del Bienvenido Mister Marshall, aunque en esta ocasión con pieles más oscuras y una traducción distante de lo asistencial para apoyar de forma incalculable el turismo norteamericano e internacional para la costa malagueña en el próximo decenio. Algunos entendidos ya han calculado que la campaña mediática publicitaria sobre la zona podría valorarse en un importe superior a los 800 millones de euros, cantidad muy lejos de ser pagada por los presupuestos de turismo de la Junta de Andalucía. En todo el mundo se sabrá que la Señora Obama ha pasado unos días en Marbella, o para ser más exactos en Benahavis, con alguna extensión programada para visitar la Alhambra en Granada y quizás la Mezquita de Córdoba. Otros especialistas en medios han evaluado que la noticia será conocida directamente a través de TV, Prensa y Radio, por más de 2.000 millones de personas. Así que el mundo ya sabrá ubicar España, porque la selección de futbol ganó en Sudáfrica, y la Costa del Sol, por el corto veraneo de la esposa del Presidente de los Estados Unidos. Ninguna feria de turismo, ni la de Berlín ni la de FITUR, soñaría jamás con semejante impacto promocional. Así que no podemos menos que agradecer la elección y los efectos que tendrá. Mientras, en la Casa Blanca, Obama se ha quedado de “Rodríguez” (que no de Zapatero), y se ha entretenido en firmar la orden para la retirada de las tropas de ataque en Irak, dejando en la zona a 50.000 soldados de los 140.000 actualmente desplegados, con tareas de adiestramiento militar y de policía y seguridad a los cuerpos iraquíes. Como justificación de la retirada, aunque ya estaba contemplada en su campaña electoral, el Presidente estadounidense ha esgrimido la disminución de la violencia en el país, cuestión que ha sido desmentida por las autoridades de Irak, aunque lo cierto es que se aproximan las elecciones de Noviembre y hay que dar algunas señales para positivar las mismas. Parece, más bien, que la oportunidad responde a la necesidad de reforzar la presencia de EE.UU en Afganistán, verdadero epicentro actual del conflicto y contar con unos efectivos preparados para una posible elevación del mismo. De otro lado, las hipótesis de una posible intervención en el vecino Irán a cuenta del enriquecimiento de uranio y la fabricación de armas nucleares. De cualquier forma saludamos la retirada o disminución de las tropas en Irak, esperando que pueda restablecerse la normalidad en el país lo más pronto posible.