UPYD, HEMOS VENIDO PARA QUEDARNOS

Las risas, chistes, comentarios jocosos y despectivos que hicieron y siguen haciendo aquellos que se creen en posesión de la única verdad absoluta y que cada vez más se sienten “CASTA” política sin los cuales nada será posible, han ido sintiendo como su atroz carcajada se convertía en una mueca imperceptible de preocupación, en un primer momento, para pasar después a una profunda incertidumbre sobre su futuro. Aquellos que despreciaron con el argumento de los sabelotodo, los talibanes de la política en España, están comprobando con sus propias encuestas que el color rosa magenta se les cuela por todas las rendijas que tienen abiertas, en muchos casos puertas y ventanas enteras. Su fundamentalismo se ha basado demasiado tiempo en sentirse poseedores de la maquinaria electoral para ganar elecciones, erigirse en los representantes del pueblo y, después, hacer lo que les daba la gana. Bueno, parece que el mantenimiento del Status Quo se tambalea, que no es tan firme como querían hacernos ver desde su observatorio de la realidad con aquellos mensajes mesiánicos y que por fin su absoluta tranquilidad, casi impune, está iniciando el final de un periodo. “Después del PSOE o del PP no hay nada”, es el mensaje que más vamos a escuchar en los próximos meses en nuestro querido país. La intensidad será cansina y los argumentos variopintos: “estos no tienen ni idea de política”, “lo único que quieren es desgastar al PP o al PSOE” (depende de quién hable); “son unos arribistas cabreados que no tienen ni ideas ni práctica política”; “vienen a aprovecharse de los efectos de la crisis para sacar rédito” y mil frases que intentarán ser hirientes y demoledoras. Nos atacarán por todos los frentes posibles y con todos los medios a su alcancen. Intentarán hacer daño nuestros líderes y dirigentes hasta la extenuación, desde lo político a lo personal sin ningún tipo de miramiento, a degüello. Pero si esa es su única reflexión y la tendencia de acción que planteen se van equivocar. Porque UPYD se ha ido construyendo muy desde abajo, con personas que hemos ido convirtiendo nuestra visión de España en discurso político que no separamos del verdadero poseedor de la responsabilidad de hacer país, la ciudadanía. Nuestro esfuerzo no se va a centrar en quitar al PP o al PSOE para ponernos nosotros, sino en trasladar al pueblo soberano las reflexiones suficientes para que sean ellos quienes los quiten. Y lo vamos a hacer, lo estamos haciendo, por la responsabilidad que nos toca de no permitir durante más tiempo un bipartidismo dependiente, absurdo y dañino para un hermoso país. No nos merecemos los políticos que tenemos y por eso hemos reaccionado. No hacerlo sería condenarnos al oscurantismo y entregarnos al marketing político. Por eso estamos aquí y hemos venido para quedarnos.